Mis fracasos favoritos

¿Quién no conoce la derrota, el error, el fracaso? Aparecen a menudo para recordarnos que estamos aprendiendo continuamente. La actividad que os propongo aquí pretende explorar su significado y valor a través de las reflexiones de varios autores y de un ejercicio de introspección. Aprender del fallo, esta es la idea.

Lectura complementaria: ¿Existe el fracaso en el deporte? (Fuente: ctxt.es)

Cuerpos y significados

«Nacer nos sitúa en una red de relaciones con otras personas y, además, nos inserta a la fuerza en una serie de categorías lingüísticas que pueden parecer naturales e inevitables pero que, en realidad, son un constructo social que se controla rigurosamente. Todos estamos atrapados en nuestros cuerpos, lo que significa que estamos atrapados en una red de ideas contradictorias acerca de lo que significan esos cuerpos, de lo que son capaces de hacer y de lo que tienen permitido y prohibido hacer.

[…]

La libertad es más que una mera cuestión de satisfacer todos los anhelos materiales, al estilo Sade. También consiste en encontrar el modo de vivir sin ser entorpecido, coartado, perjudicado o activamente destruido por el refuerzo constante de las ideas acerca de lo que está permitido a la categoría de cuerpo que se nos ha asignado.» 

Olivia Laing (Todos los cuerpos)

Cuerpos buenos y cuerpos malos

«Aunque suena a pura retórica del Tercer Reich, quien inventó el concepto de eugenesia en 1883 fue Francis Galton, que era primo de Darwin. Pensaba que el ser humano podía mejorar mediante la selección artificial, como las ovejas y las vacas. […] Un futuro utópico habitado por el mejor ganado.

[…]

La eugenesia siempre consiste en identificar qué tipos de cuerpo merece la pena conservar y qué tipos habría que eliminar del establo común de la humanidad.» 

Olivia Laing (Todos los cuerpos)

Prefiero al que pierde

«Pienso que es necesario educar a las nuevas generaciones en el valor de la derrota.

En manejarse en ella. En la humanidad que de ella emerge.

En construir una identidad capaz de advertir una comunidad de destino, en la que se pueda fracasar y volver a empezar sin que el valor y la dignidad se vean afectados.

En no ser un trepador social, en no pasar sobre el cuerpo de los otros para llegar el primero. Ante este mundo de ganadores vulgares y deshonestos, de prevaricadores falsos y oportunistas, de gente importante, que ocupa el poder, que escamotea el presente, ni qué decir el futuro, de todos los neuróticos del éxito, del figurar, del llegar a ser.

Ante esta antropología del ganador de lejos prefiero al que pierde. Es un ejercicio que me parece bueno y que me reconcilia conmigo mismo. Soy un hombre que prefiere perder más que ganar con maneras injustas y crueles. Grave culpa mía, lo sé. Lo mejor es que tengo la insolencia de defender esta culpa, y considerarla casi una virtud». 

Pier Paolo Pasolini

De qué hablo cuando hablo de correr (por Diana García-Retamero Fernández-Balbuena)

Diana, de 3º ESO, ha participado en el club de lectura leyendo De qué hablo cuando hablo de correr, del escritor japonés Haruki Murakami. Diana ha seleccionado un párrafo del libro que le ha parecido especialmente interesante –a mí también me lo parece– y ha realizado una ilustración inspirada en esas líneas. Muy buen trabajo, Diana. Muchas gracias.