En las tareas anteriores hemos visto como el término deporte nos evoca palabras e imágenes muy diversas que representan parte de las creencias, valores y significados que le atribuimos. Recordad que a todo eso lo llamábamos imaginarios.
Pero estos imaginarios ofrecen sólo una realidad parcial, una visión incompleta y sesgada del deporte. Siempre quedan fuera otras realidades más marginales que no llegamos siquiera a conocer o que no las comprendemos demasiado bien porque no cuentan con el interés de los medios de comunicación masivos, como puede ser el deporte popular u otras realidades que pueden dar lugar a situaciones problemáticas del deporte que generan exclusión o violencia (dopaje, corrupción, explotación infantil, etcétera).
Ahora os propongo una nueva tarea donde desafiar vuestras propias creencias, cuestionar vuestros imaginarios y asumir que desconocemos muchas realidades del deporte que no se nos muestran en los medios, o que quizá nunca nos hemos detenido a observar de forma crítica. Vamos a problematizar el deporte.
¿Qué significa problematizar?
Reflexionar, cuestionar; pensar de forma crítica, creativa, ética.
¿En qué consiste la tarea?
A partir de vuestras imágenes y textos de la tarea anterior, tenéis que identificar una situación-problema del deporte que os interese y que creáis que también es relevante resolver en la sociedad. Buscad una situación que os movilice a encontrar soluciones más justas, más sostenibles, más éticas en definitiva. Esa situación, al ser abordada y resuelta de un modo distinto, supondría una transformación de la realidad deportiva tal y como la conocemos hasta ahora.
Recordad, no basta con hacer referencia al problema, hay que enunciarlo de forma clara y concreta; sed cuidadosos con el lenguaje y escoged bien las palabras. Podéis describir el problema en unas pocas líneas.
Aquí tenéis un ejemplo de una situación-problema que una alumna de 1ºESO identificó el curso pasado y que enunció así: :

¿Cómo identificar una situación-problema?
Podemos hacerlo de diversas formas. Una de ellas es haciendo una lista lo más amplia posible de interrogantes sobre ese tema que nos ocupa. Preguntas que nunca fueron hechas o que a menudo no se hacen; algunas podrían ser estas:
¿A quién o quiénes beneficia y perjudica?
¿Qué tipo de intereses hay detrás?
¿Qué implicaciones o impacto tiene en el medio ambiente?
¿Invisibiliza, excluye o margina a las personas?
¿Qué tipo de pensamientos o dinámicas sociales fomenta?
Etc.
Otra estrategia que ayuda a detectar una situación-problema consiste en pensar en un marco o un proyecto mayor que nosotros mismos; es decir, pensar dejando de vernos como «el ombligo del mundo». De este modo, nos preguntaríamos cómo esa realidad del deporte afecta a otras personas, a mi vecindario, a mi pueblo o incluso a la humanidad. Puede que eso que a nosotros nos produce fascinación también provoque desigualdad, explotación, invisibilización o negocios sucios. Vamos a investigarlo.
Fuentes:
MARIÑO RUEDA, Carlos Fernando. Problematizar: acción fundamental para favorecer el aprendizaje activo. Polisemia, No. 17, 40-54. Bogotá, ISSN: 1900-4648. Enero-junio de 2014.